A veces no nos damos cuenta que las herramientas no tienen palabra de honor, y las fallas y errores se encuentran todo el tiempo. Quisiéramos que la normalidad anterior a la COVID, se trasladara al presente. Y no es así. 

En mis años de asistencia a la escuela como estudiante, me encontré maestros y otros que, aunque tenían el deseo de enseñar, las acciones diferían y no era su culpa, la personalidad que construyeron o le construyeron no le daba las herramientas básicas para el oficio. Hoy muchos docentes están ante un gran reto: Estar fuera de sus aulas.

Nunca he estado de acuerdo en ser "vigilado" al momento de dar un curso, un taller o cualquier acción que involucre la enseñanza y nunca lo estaré. Sin embargo, al ver a alumnos y maestros perdiendo la paciencia como en el siguiente video, me pregunto: ¿No nos hemos dado cuenta de la nueva normalidad?

fuente: usuario de facebook desde el portal https://www.sinembargo.mx/01-10-2020/3869845


Ahora más que nunca, nuestros hábitos, prejuicios, juicios, valores, emociones, sentimientos, entre otras más cosas que nos hacen humanos, quedan expuestos y si en algún momento pensábamos en una idea similar a: "Soy así, no voy a cambiar", es momento de cuestionar tal idea.

Vemos en el video la autoridad de un maestro vs la incertidumbre de alumnos que no son escuchados. 

La autoridad es una herramienta casi obsoleta que muchos se niegan dejar. La autoridad no es una herramienta, es un valor y esa no se crea por uno mismo, sino es construido por aquellos que le rodean. Un ejemplo muy claro es la "honestidad". Para que alguien sea honesto u honesta, depende de que otras personas construyan esa imagen de esa persona como honesta. Si esa misma persona llega y me dice: "Soy honesto", no le creería porque necesitaría preguntar a otros que le conocen si lo es o no. La autoridad es un valor no una herramienta.

Tuve maestros muy permisivos pero con autoridad. Tuve maestros autoritarios sin autoridad. Si enseñamos la autoridad como herramienta, entonces veremos reacciones como la del estudiante donde impone autoridad con base a la institución amenazando al maestro de reportarle al tener pruebas de que sus compañeros tenían abierta su cámara aunque no era visible para el docente. Qué debemos defender ¿Autoridad o Autoritarismo? Yo defendería la autoridad, pero no la lucha de poder y violencia que causa el autoritarismo el cual pasa de estafeta entre maestros y alumnos utilizando a la institución como juez y parte y con ello llegar a dos consecuencias principales que nadie desearía:

  • Despido temporal o definitivo del maestro
  • Expulsión temporal o definitiva del alumno

¿Qué consecuencias traerá esto en el futuro? ¿Será que estas actitudes pasaban en los salones de clases y no eran visibles? ¿No nos hemos dado cuenta de la frustración que provoca en ambas partes (docente y alumno)? ¿Esto fue o es factor para la descomposición social que vivimos a causa de la construcción distorsionada de la autoridad? ¿Vivir entre autoritarismo nos ha hecho creer que eso es autoridad?